Os voy a contar algo que casi seguro no sabéis.

HAY GENTE QUE LE DA DE COMER A LOS PATOS

¡Sí! ¡Como lo oyes! ¡hay gente “pa-to”! #risas

Estas buenas personas atesoran curruscos de pan a lo largo de la semana pensando en los patitos del estanque de su barrio.

Para ellos dar de comer a los patos es un momento agradable, divertido y les hace sentir que son buenos y que tienen buen corazón. Además, es una actividad que aparentemente es educativa para hacer con niños y así a simple vista, parece que no hace daño a nadie.

Algunos además de sentirse bien por “dar de comer al que tiene hambre” piensan (equivocadamente) que esa acción es más ecológica que tirar el pan a la basura.

Dar de comer a animales salvajes, urbanos o asilvestrados no es ecológico.

Vaya por delante que yo también les daría de comer, si no supiera lo que os voy a contar. Ya os conté mi pasión por las aves en otro artículo titulado: ORNITOLOGÍA, BIG YEAR, DISTORSIONES COGNITIVAS Y PPM

MIGUEL, MIGUEL…PARA… ¿PERO QUE TIENE QUE VER ESTO CON LA PSICOLOGÍA?

Lo resumo en una frase.

A veces hacemos cosas o tomamos decisiones pensando que son buenas para otro, y lo que hacemos es “enfermarlo”.

Pensamos que hacemos lo mejor para nuestros hijos, pareja, padre, madre…amigos…y no.

Tu intención es buena, pero el resultado es “malo” …muy malo. 

En terapia individual o de pareja podemos identificar situaciones similares.

¿POR QUÉ NO ES BUENO DAR DE COMER A LOS PATOS?

Una dieta basada en el pan o en las patatas fritas (con exceso de calorías y carbohidratos) produce una enfermedad en las aves llamada Ala de Ángel.

Esta patología provoca la deformación en las articulaciones de las alas, se les tuercen las alas hacia arriba impidiendo el vuelo, y por tanto el pato muere. Así de claro. Si nunca has visto un pato muerto es porque se esconden para morir.

Cuando tenemos conocimiento e información, nuestra visión cambia. Lo mismo pasa cuando aprendemos o estamos asesorados por un buen psicólogo.

Algunas de las decisiones que tomamos que parecen la mejores, no lo son.

Ahora la escena de una “buena persona” dando de comer a los patos, es una imagen de alguien que está enfermando a los patos. Perdón por fastidiar esta imagen tan amable.

¡Qué importante es saber! ¡formarse! ¡estar bien asesorado! …si quieres que el mundo mejore.

Si solo quieres que el mundo sea “bonito”, es mejor no saber demasiado.

Además de la muerte por “ala de ángel” muchos mueren por fallos renales o por problemas asociados a la obesidad.

Otra consecuencia dramática, si realmente tienes aprecio por el pato, es que las crías no aprenden a buscar comida, ya que solo ven a sus padres comer de “comida rápida”. Es como si tú solo hubieras visto a tu padre y/o madre pedir pizzas por teléfono, seguro que no sabrías freírte un huevo.

NO PUEDO PARAR…

Y ya que nos hemos puesto a demonizar el pan mojado en el estanque; los restos de comida hace que el agua se llene de algas, mohos y de microrganismos que generan infecciones #queasco.

Son numerosas las noticias de plagas de roedores cerca de los estanques. Las aguas poco oxigenadas, son criaderos de plagas de mosquitos. Sí, esos mosquitos que no te dejan dormir, o esos que pican a los conejos con Leishmaniosis y que terminan picando a tu perro.

¿Conclusión? Los restos de comida son el inicio de varias consecuencias nada deseables. La intención es buena, pero da muy malos resultados.

La persona se siente bien haciéndolo, pero no hace el bien.  Esta frase es para pensar. A veces establecemos la bondad de una conducta en función de cómo nos hace sentir y eso no siempre es así. Hacer el bien, no siempre reporta placer o bienestar.

A veces hay que castigar a un niño, y a pesar de que no es agradable, si el castigo es justo, le ayudarás a distinguir lo correcto de lo incorrecto.

NO OS LO VAIS A CREER…

PERO HAY GENTE QUE NO QUIERE SABER LA VERDAD

Hace años cuando era más joven e inocente, me acerqué sonriente a algún padre o madre de familia, y amablemente le intenté explicar los hechos. Me salió el 90% de las veces el tiro por la culata. La gente me miraba como si estuviera loco, alguno incluso se puso agresivo.

La respuesta general fue el insulto, el desprecio o la indiferencia más o menos directa. Recuerdo un padre de familia que según empezaba a explicarle…dejo de lanzar pan y volcó totalmente la bolsa de pan sobre el agua. Esa fue su respuesta.

Lo he dejado de explicar a desconocidos, pero reconozco que la imagen de las familias alimentando a los patos me llena de tristeza. Cada uno es cada uno. Así soy yo.

En el estanque de mi barrio la gente lleva años arrancando los carteles donde se lee con claridad: “POR FAVOR NO DEN DE COMER A LOS PATOS” y en letra más pequeña alguno de estos motivos que yo he expuesto.

Da igual, los carteles no duran más de una semana. Los arrancan…

La libertad no es eso. La libertad es algo más hermoso y profundo.

Esa “libertad” basada en “yo hago lo que quiero -si a mí me hace sentir bien-” … está hecha de harinas refinadas.

TU INTENCIÓN ES BUENA, PERO EL RESULTADO ES “MALO”

Ya lo decía el fallecido director de cine y humorista Manuel Sumer en su película: To er mundo é güeno (1982).

En consulta a veces identificamos ideas o dinámicas relacionales bien intencionadas, pero con malos resultados. En mi artículo «Matar a la vaquita» explico algún ejemplo de padres con buenas intenciones.

Yo hoy con mucho cariño y respeto y con muy buena intención abordo la decisión:

YO NO ME SEPARO…POR EL BIEN DE MIS HIJOS.

Dicen los padres y las madres:

No quiero que mis hijos vivan en una familia desestructurada. No quiero que les falte la figura masculina/femenina. Ahora son muy pequeños: ¿cómo me voy a separar? Quizás cuando sean mayores lo haga.

¿TIENEN ARREGLO TODAS LAS PAREJA?

Respuesta: No.

Nota: Arreglo, no es igual a “no separarse”.

Aclaración:

No soy de los que creen que hay que tirar la toalla a la primera de cambio.

Tampoco creo que existe un modelo único de pareja normativa-perfecta, hay muchas maneras de ser pareja, de buscar soluciones para ser felices en compañía de otro.

Las parejas pasan “épocas”… y esas épocas destruyen y reconstruyen, y ese proceso hace fuerte a la pareja. Es parecido a ganar músculo, es necesario romper fibras, para luego reconstruirlas.

Querer es difícil y sentirse querido y entendido también.

Amar a alguien es estar a las duras y a las maduras. Acordar. Proyectar futuro. Construir intimidad. Asumir pérdidas. Aceptar el duelo de no estar con otro/a.  Amar es difícil, pero tiene que ser vivible y, en términos generales, satisfacer.

Ninguna pareja está bien al 100% y no pasa nada grave. Creo que queda claro que no creo que haya que romper al primer conflicto, pero hay veces que no hay mas remedio que hacerlo, y hay que hacerlo por el bien de los hijos. 

¿QUE UNA PAREJA LLEVE 40 AÑOS JUNTOS ES BUENO?

Pues depende. Hay veces que he escuchado biografías de 40 años de matrimonio infernal, infernalmente aburrido o infernalmente conflictuado. Eso no es bueno para nadie, ni para los padres, ni para los hijos.

Me viene a la cabeza la frase que parece explicar popularmente muchos de los problemas psicológicos:

Es hijo de padres separados…

como si ese hecho explicara el origen de todo mal.

“El mal” crece en muchos “sembrados” diferentes.

El mal también puede nacer de “la familia unida” y que debería estar separada, desde hace tiempo porque la pareja ni se quiere, ni los adultos saben vivir juntos.

HIJOS DE PADRES “NO” SEPARADOS

La intención de no separarse por los hijos es buena, pero el resultado suele ser catastrófico. Igual que esto que contaba de dar de comer a los patos.

Permíteme la licencia literaria:

• HOY: Las consultas están llenas también de esos hijos/as cuyos padres no se separaron.
• EN EL FUTURO: Las consultas se llenarán de estos hijos de padres no separados en el presente. 

Los menores crecen observando un modelo de pareja que no hace equipo, que no se muestran afecto, que se comunican mal, que se critican de manera sutil y/o directa, que no se ríen, que no se hacen carantoñas, respiran un ambiente de tensión, tristeza y en muchos casos sentirán miedo y casi siempre culpa.

Los niños/as de padres NO SEPARADOS aprenden por observación: LO QUE NO DEBE SER UNA FAMILIA. Aprende que hay que “aguantar” pase lo que pase.

Y da igual que no griten delante de los hijos, o que incluso se lleven relativamente bien…los niños se dan cuenta de que sus padres no son felices.

La amargura también se hereda. 

Una de las consecuencias más dramáticas es que los niños aprenden que es razonable quedarse en sitios donde no son felices o donde les hacen daño.

Cuando son adultos, les puede pasar lo mismo, que no tomen decisiones y se queden con una mala pareja o con alguien que les trata mal.

Son como esos patitos que no aprenden a buscar comida, donde digo comida, digo “felicidad”.

TENGO MIEDO

Tengo miedo. No quiero ofender a nadie con este texto, ni mucho menos culpabilizarlo o juzgarlo. En ningún caso quiero decirle a nadie qué hacer o cómo vivir. Como siempre, invito a la reflexión. Sé que muchas personas están en situaciones más complejas de lo que yo he expuesto en estas pocas líneas.

Siempre creo que la gente hace lo que puede.

Solo he juzgado con justicia a quienes arrancan los carteles donde se lee eso de: “POR FAVOR NO DEN DE COMER A LOS PATOS”.

“Solo juzgo” al que no quiere saber, pagando el precio de perder algún cliente que no entienda la buena intención de este texto.

VAMOS TERMINANDO…

No sé si te tienes que separar. Tienes que pensarlo tú. Piensa en lo mejor para tus hijos y para ti, pero quizás te ayude cambiar el enfoque. No siempre la familia unida es la opción correcta.

A veces, no hay más remedio que separarse por el interés superior del menor.

Esta expresión, vinculada al Derecho, significa que todas las decisiones deben estar orientadas al bienestar del menor, a la defensa de sus derechos…el derecho a una vida tranquila, a un hogar donde el amor reine y las normas estén claras.

Quizás sea mejor que el chaval pague el precio de la incomodidad de repartirse entre dos casas, que la tristeza y la tensión de vivir en una sola casa de “padres no separados”.

A LO MEJOR DAR DE COMER A LOS PATOS…NO ES TAN BUENO COMO PARECE.